Poeta

Poeta
Matías Antón Mena

domingo, 11 de diciembre de 2011

¡OH CUBA MÍA! (SUEÑOS CUBANOS)






          ¡OH CUBA MÍA!
   





     Las ocho de la mañana,
el sol comienza a despertar
y riela sobre el agua.
Entre las nubes ahora grises,
ahora naranjas,
se desperezan sus últimos bostezos,
y esta paz, esta quietud llega a mi alma.
Yo te saludo Cuba, desde España.
¡Oh Cuba mía!
Si yo supiera cantarte
como canta el ruiseñor
cuando te despierta el día.
Si yo pudiera besarte
como besan con dulzor
las blancas olas tu bahía.
¡Oh Cuba, oh Cuba mía!
¿Por qué te dejé tan sola?
Yo quisiera ser aire
para acariciar tu rostro,
quiero el verde de tus palmas
y el rojo de la amapola;
quiero encontrar mi corazón dormido
dentro de una caracola.
Quisiera ser el ave
que vuela libre en tu cielo
sin darse cuenta que existe 
lo que está abajo, en el suelo.
¡Oh Cuba, oh cuba mía!
esa inocencia la perdí aquel día.
Fue la noche más larga,
la hora más corta
en que cerré los ojos,
aunque no dormía.
"...y Diós tan generoso
me deletreaba ternuras al oído."
¿Te acuerdas?
Yo caminaba como un niño perdido
cuando salí de Cuba
por un angosto camino
de cristales de acero.
¡Oh Cuba, oh Cuba mía!
y desde entonces,
ya nunca tuve consuelo.

martes, 6 de diciembre de 2011

CONVERSACIONES CON MIGUEL

 
 
 
 
 
 
LA PIARA HA AUMENTADO,  MIGUEL,
DE CERDOS BASTARDOS,
INSACIABLES MESTIZOS,
QUE SE ARRIMAN
PARA OBTENER MIGAJAS SIN LUCHA,
SUS BARRIGAS:  SATISFECHAS.
EL HAMBRE ES LA MISMA, MIGUEL,
Y CRECE A CADA PASO, 
POR SUERTE A ALGUNOS
NO LES VENCE LA FATIGA,
Y SU VOZ ES ALUMNA DE LA TUYA, 
TU VOZ AMIGA.

domingo, 4 de diciembre de 2011

NOVIEMBRE



( III )

Oculto en el jadeo
de lenguas que se atrapan,
las manos no son manos,
y el cuerpo los surcos
por donde fluye el agua,
y un grito penetra,
desgarrado,
en las entrañas.

 

sábado, 3 de diciembre de 2011

LA PALABRA




"La palabra es sacra para quien la pronuncia y mágica para quien la escucha"
                                                                                       (Jean Paul Sartre).

Nicanor Parra

El poeta chileno Nicanor Parra, Premio Cervantes 2011, creador de la antipoesía.


"La poesía morirá si no se la ofende, hay que poseerla y humillarla en público.  Después se verá lo que se hace".
                                                                                                                                    - Nicanor Parra, "Artefactos" -

 

 

EL VALOR DE LA PALABRA

......................Las palabras recogidas en este libro son una creación, un canto a la imaginación del hombre, un ramillete de actos creativos que han engendrado algo sacral. Y entiendo que ésta es la actitud más fundamental àra acercarse, querido lector, a la poesía de Matías Antón.........La poesía de nuestro poeta es claramente intimista y apasionada. Con una gran dote de sutileza, sabe conjugar los sentimientos que fluyen de su interior con los elementos naturales y humanos que aparecen en el transcurso de su vida. Y su narración es escueta, pero penetrante; lúcida y a la vez desgarradora; certera y profunda. Su principal herramienta, la palabra, la convierte en todo un torrente cargado de simbolismo que desea transmitir al exterior, es decir, lo más original y genuino de su ser personal.............Su poesía respira esa honestidad de quien se sabe embriagado por un espíritu joven, siempre renovado, limpio y especialmente sensible..........................Haber convertido la poesía en discurso autoreflexivo, en una polifonía de signos, símbolos y emociones, constituye algo radicalmente nuevo: un acto de creación por excelencia........
                                                                       
RAMÓN MINGUEZ VALLEJOS
Doctor en Pedagogía y Catedrático de la Universidad de Murcia.

miércoles, 30 de noviembre de 2011

NOVIEMBRE






        (II)






Desplaza el sol la noche
a empellones y mordiscos
y la luz de una farola
lucha por sobrevivir.
Aparece sólo un coche,
con pasajeros dormidos
y matrícula española,
por las calles de París.



lunes, 28 de noviembre de 2011

NOVIEMBRE






          I  )





Yo no sé si estoy durmiendo
cuando miro al mar y sueño
para no pensar en nada.
Yo no sé si soy cobarde
si dejo que el sol me invada;
yo sólo sé que siento,
y muy profundo en mi alma,
algo que no tiene nombre
y no sé como se llama.

miércoles, 23 de noviembre de 2011

CANCIONERO DE MI PUEBLO





TORREVIEJA, "GAVIOTA ERRANTE"







Torrevieja,
al sur de Alicante,
puerto de mar,
gaviota errante,
ni horizonte ni frontera,
ilusión,
brisa viajera,
paraíso terrenal
por los mares pregonado,
conglomerado de sal
y palmera, al amparo
del clima primaveral,
y de la dulce habanera.

viernes, 18 de noviembre de 2011

CANCIONERO DE MI PUEBLO





CORAZÓN DE CRISTAL







Con mis manos construí
de juncos un corazón,
que en la laguna dejé
y la sal cristalizó.

Sin pensar en él
lo dejé olvidado,
y me marché
cuando el cielo era claro.

Corazón de cristal,
mágico cubo de sal
que el tiempo no marchitó,
cada año floreció
repitiendo su cantar:

(estribillo)
"El mar me robó la ilusión.
El sol, me contó la verdad.
Y yo no lo via aparecer,
pero vendrá, soñé (I)
esperaré (2).

Hoy he vuelto hasta la orilla
a buscar mi corazón,
fue el amor de una chiquilla
que en Torrevieja quedó,
pero el tiempo no perdona,
y el cristal se me rompió
cuando lo tuve en mis manos,
mientras cantó su canción:
(al estribillo)

ELEGÍAS






MI VINO POBRE PARA TU SED DE AMIGO,
MIGUEL HERNÁNDEZ





Supiste a tuera, amargo,
cuando entre amapolas,
sobre el heno,
levantaste el puño de tu hermano
en un gesto de lucha,
de espíritu sereno.

Pasaste, que todo es pasar,
comiendo la cebolla de tu cielo,
pero esta nube oscura que cubre el limonar,
se ensañó en la sangre de tu mano,
bebiendo de la herida tu veneno.

Tu voz es silbo de cayado;
tu vida ejemplo, por sencillo;
tus versos golpe a golpe se han forjado.
Tu huella, se dibuja en el camino.









lunes, 14 de noviembre de 2011

CANCIONERO DE MI PUEBLO







DÉJALA SOÑAR





Si al pasear
por la arena dorada,
en una noche 
del periodo estival,
oyes crujir un madero
con el rumor de las olas,
siéntate un rato, viajero,
en el noray donde un día
la dejé amarrada.

,
La suave brisa
golpea mi barca,
y sus amarras,
dando bandazos,
besan el agua
para secar su llanto

La luna lo sabrá
que yo no estoy allí,
pero mi barca seguirá
esperando el día de partir.

No le digas que me fuí
y que nunca volveré,
no le digas que dejé
el pueblo donde nací.

Y déjala soñar
que me ve aparecer,
con los remos al hombro
y los pies desnudos,
hoy como ayer.
 


lunes, 31 de octubre de 2011

DEL CORAZÓN HACIA DENTRO

fotografía de 1.957
(Aurora Catalá)
¡Cómo se nos va la vida!
A grandes tragos.
Un vino dulce, un vino aciago,
un sorbo de agua clara olvidado

No nos dio tiempo a querernos
como yo hubiera querido
y nos quisimos deprisa,
al ritmo que marcaron las aspas
y las lonas del molino.
A veces el grano medio,
y otros tiempos polvo fino.
Siempre tuve la garganta
estrangulada en un punto,
siempre anduve Sancho Panza
de tu soledad prendido,
siempre tuve mariposas
en el prado de tus ojos,
y todavía las siento
a dos metros de mi mismo.

¡Cómo se nos va la vida!
¡Y qué poco hemos vivido!

¡Cómo se nos va la vida!
apriétame si me duermo,
despiértame, que ni un minuto
ha de alejarme el reloj de ti,
bésame en los ojos,
susúrrame al oído,
mírame, mírame a mi.
Que tengo celos del aire, del sol,
del universo que envuelve
este quehacer impreso,
esta norma del destino
que nos marca directrices,
este sino,
que nos hace seguir siendo.
Quédate, quédate conmigo
que tengo miedo.

Tu eres mi dios,
tu eres mi muerte.
¡Cómo se me va la vida!
Si me marchara de noche
vístete del color de la amapola,
para dar vuelta a la esquina
cuando ya no esté presente,
que murmuren los pueblos,
que chismorreen las vecinas
que saquen filo a las hachas.
Como decía tu madre
que hacía Lola “La Macha”.

¡Cómo se nos va la vida!
¡Y cómo te necesito!
¡Cómo se viene la muerte despacito!
Quisiera volver a amarte,
aunque, más, no lo concibo.

domingo, 30 de octubre de 2011

CUARENTENA AL DESAMOR

Poema de Miguel Ángel Hernández
Recita Matías Antón Mena.
música: Opus 3 nº5 (trio)de Joseph Haydn (directo)
interpretes: Cuarteto Clave de Torrevieja

viola, Sofía Ramos
chelo, Antonio Torregrosa
violín, Daniel Cánovas
violín, Víctor Antón

sábado, 29 de octubre de 2011

CUARENTENA AL DESAMOR



Poema de Óscar Albaladejo Claramunt.
Recita Matías Antón Mena.
música: Canon en Re M de Johann Pachelbel (directo)
interpretes: Cuarteto Clave de Torrevieja

viola, Sofía Ramos
chelo, Antonio Torregrosa
violín, Daniel Cánovas
violín, Víctor Antón


viernes, 28 de octubre de 2011

CANCIONERO DE MI PUEBLO





UN MARINERO
 






(I) Un marinero una vez
tras un fuerte temporal,
nadando vino a acaecer,
como la espuma del mar,
a la salida del sol,
sobre tu arena sin par
y por siempre se quedó.

Sintió el azul de tu cielo,
bebió la luz de tu luna
e hizo barcos veleros
con perlas de tu laguna.

Anduvo en alas del viento
sobre tus olas plateadas.
Cantó habaneras por puertos
de otras tierras muy lejanas.

Y volvió, volvió a tu suelo,
a su Torrevieja amada,
donde como marinero,
una mujer lo esperaba.

(II) Como la espuma del mar
a la salida del sol,
dormido en un madero
no te pensaba encontrar.

(III) Cuando el barco naufragó
arrastrado por tu luz
soñó que el cielo eras tú
y por siempre se quedó. 


CANCIONERO DE MI PUEBLO





TORREVIEJA
O GAVIOTA ERRANTE






Torrevieja,
al sur de Alicante,
puerto de mar,
gaviota errante,
ni horizonte ni frontera,
ilusión,
brisa viajera,
paraiso terrenal
por los mares pregonado,
conglomerado de sal
y palmeras, al amparo
del clima primaveral,
y de la dulce habanera.

"CUARENTENA AL DESAMOR"



Ayer, 27 de octubre de 2011 fue un día especial para mi porque se presentaba un libro de poesía, un libro de sentimientos de dos amigos míos, uno desde la infancia, Oscar Albaladejo Claramunt y otro compañero de escena en mis andaduras teatrales, Miguel Angel Hernández, ambos torrevejenses, periodistas muy sumergidos en el mundo de la palabra.
Tuve el honor de ofrecer un pequeño recital  en el salón principal del Casino de Torrevieja con nueve de sus poemas, y la oportunidad de utilizar mis aficiones empáticas para intentar hacer sentir al espectador las vivencias crudas y desnudas que reflejan las páginas de este hermoso y rompedor libro titulado “Cuarentena al Desamor” prologado por mi querida Cármen Ortiz; recitando sus versos, arropados con el abrazo de las notas del incipiente cuarteto de cuerda "Clave" evocando a Bach, Haydn, Pachelbel, Franz Schubert, John Barry, Alberto Iglesias y Nino Rota.
El sabor de esta noche, lo tendré guardado en las papilas gustativas de mi cerebro mientras el tiempo me lo permita.
            Un aplauso para ellos desde la admiración y el cariño.

ESTA SEMANA SUBIRÉ LOS VIDEOS DEL ACTO.

jueves, 6 de octubre de 2011

EPILOGO DEL DESENCANTO

Este Epílogo del Desencanto es uno de los capítulos de mi nueva obra titulada:
"50 AÑOS DE LA MANO DE MI MISMO"
en breve publicaré la portada.















EN LOS IDUS DE MARZO

Idus Martis pienso que nací,
porque se me torna la leche en vino,
vino amargo, trago que desgarra
mi temple a cada paso.
En los Idus de Marzo paréceme que vivo
sobre una piel de astado teñida de color,
el mismo que los dioses me quieren diluir.
Y así cansado y laxo
en todos los aspectos,
me asquea formar hoy, parte
de esta sociedad de oscuras cavidades,
de cáliz y marfil,
de intolerancias viejas y de distingos rancios,
ansiosa cual vampiros que salen a cazar.
Así las gotas blancas
de aquellos que murieron,
se tornen sable y fuego detrás de sus gargantas
y lloren sin consuelo toda la eternidad.
Políticas de miedo sobre los campos yertos
 arrasan con el verde de las colinas nuestras,
vientos que van y vienen,
con la guadaña en mano,
para cortar las sienes de todos los que piensan.
En los Idus de Marzo
 se me muere la tierra.
¡Que venga una legión de asteros!
En los Idus de Marzo,
 si nadie lo remedia.

miércoles, 5 de octubre de 2011

MIRANDO ATRÁS




Al fin sin darme cuenta y complaciente
recojo la manzana a la serpiente
y con su anuencia atravieso el velo:
me enfrento a todo; al sol, al viento, al cielo;
luego me despierto y no soy consciente.

Si miro el sol que con mi mano alcanzo,
y cuando bebo el mar, me satisfago,
¿por qué el cielo me concede un plazo
si cada amanecer no se lo que hago?

Si el viento me acecha y me causa espanto
y el sol, tan cruel, me oculta las estrelllas,
¿a qué vivir sin ver las cosas bellas,
si no puedo escuchar de un ave el canto
ni acariciar la piel de las grosellas?

Si todo cuanto digo es inconcuso
y siempre ha sido la fortuna mía,
¿por qué hilé mi vida con un huso
pensando que el amor se deshacía?
Y, ¿por qué anduve siempre tan confuso?

lunes, 3 de octubre de 2011

EPÍLOGO DEL DESENCANTO



Este Epílogo del Desencanto es uno de los capítulos de mi nueva obra titulada:
"50 AÑOS DE LA MANO DE MI MISMO"

 en breve publicaré la portada. 


















RUCIO
                              
Rucio, maltrecho y con el corazón alado,
el tegumento en un repliegue,
curtido por dentro de tormento,
acorralado,
exoftálmico mirando el mar,
me descubro sentado en un barbecho
donde nada vivo soporta mi pesar,
como un lagarto,
con la sangre gélida,
esperando que un rayo de sol me llegue
y me cure el alma desvalida,
el soplo que ahora exhalo,
transformándome siquiera en una araña,
como pasa a veces en los cuentos.
Por algo siento que más que vivas
están muertas mis entrañas.
Alado si, y a veces ciego,
he creído sentirme que sentía,
me he vestido de pájaro,
de vez en gaviota herida,
de peregrino y de cielo,
he ido dando por doquier palos de ciego
y no me daba cuenta
que en cada amanecer yo me moría.
Bien es cierto que hago
siempre lo que puedo,
mas lo que soñé, lo que quería,
tal vez no he conseguido nunca conocerlo.
Soy como un loco que no encuentra el día,
el aguilucho que no consiguió
remontar jamás el vuelo.
una tortuga resentida,
que resignada en su porfía,
como un reptil se arrastra por el suelo.
Sin embargo me caigo y me levanto,
me duermo y me despierto,
siempre un velo negro,
como una losa de cemento.
¿Qué pude ser en otra vida,
para pagarlo tan caro
en este mundo en que me encuentro?.


domingo, 25 de septiembre de 2011

FRÁGIL



 
Detrás del escaparate
vestido con piel de oso, 
se paseaba un leproso
sin poder hablar con nadie;
desnudo de sentimientos,
deshojando margaritas,
dejaba pasar las horas
de su existencia maldita,
tan sólo una mariposa
con las alas purpurinas
se posaba en las esquinas 
de su cárcel misteriosa,
y dos perlas milagrosas
depositó en sus mejillas,
y una sonrisa divina,
y un revoloteo de alas,
y un aire fresco
le devolvían la vida.
Y como cada mañana
entre pétalo y pétalo, la esperaba,
hasta que intentó tocarla
y quedaron prisioneros,
entre sus dedos,
los hilos de su alma.

viernes, 29 de julio de 2011

REQUIEM


REQUIEM POR JOSE HODAR TALAVERA
a ritmo ternario

 
Esta es la portada del nuevo libro que estoy acabando. Está escrito en prosa y versa sobre la historia de mi pueblo y sus gentes, se trata de un recuerdo entrañable para mi profesor de francés, José Hódar Talavera, un reconocimiento particular a priori y espero que general, más tarde, a un personaje libre pensador y artista en el espacio-tiempo en el que le tocó vivir.

lunes, 16 de mayo de 2011

Mis respetos


 
             Quiero presentar mis repetos a Francisco Rebollo Ortega, por la labor histórica que está realizando en el Vista Alegre y en Internet (http://franciscorebollo.blogspot.com); y porque hoy precisamente, me ha tocado la fibra sensible con una estrofa de uno de sus poemas, que me ha trasladado especialmente a mi infancia y me ha hecho sentir y recordarme a mi mismo y a mi familia. Gracias.

"Las casas bajas con pozos
con aljibes y canales,
carbón y leña en manojos
orsas, lamas y marguales"

domingo, 10 de abril de 2011

SOLEDAD HERMANA



                 


X
Soledad hermana

Cansado de la pena porque la pena pesa,
te hago la promesa de que lo voy a intentar,
bien sabes que débil por siempre me he tenido
y no gusté jamás de guerras y pendencias,
pero cuando algo es justo lo lucho desabrido
cual  alazán salvaje,
un ser acorralado, sin género y sin nombre,
un hombre, un simple  hombre, ajeno a las pendencias.

Yo creo en la fortaleza que siempre has demostrado
y quiero que ahora luches con toda tu heredad.
Ejemplos has tenido desde que fuimos niños,
y ya cuando los hielos del tiempo nos congelan,
con las nieves caídas sobre las barbas ferrosas,
subidos en un bote, al mar, a la deriva,
yo te he visto fuerte, remar y no llorar.

El halo de esperanza que rueda en nuestras mentes,
y quiere enloquecer,  
que flota en el ambiente,
 de gente, mucha gente,
que aflore para siempre a nuestra mesa,
que llene nuestros platos,
que ruede por  las cosas,
que traiga la alegría e inunde nuestro lar.
Pasaron muchas noches a lo largo del tiempo,
y todas se han vivido a pecho descubierto.

No se si en la capaza nos queda algo de pan,
pero comeremos juntos ese maná divino
que habremos de amasar.
Y yo seré el payaso que tras la cara blanca,
hombre serio y deprimido,
lanzando un alarido,
os hace divertir.
Yo soy payaso triste, pero siempre lo he sido.

Cansado de tormentas, que la tormenta agota,
vendrán tiempos mejores, e iremos a nadar.
Y escribiré aquel cuento que yo siempre he querido.
¿Tú has visto aquellas olas, que chocan en las rocas,
bregando unas con otras, luchando sobre el mar?
pues cuando el viento  duerme y al azul viene la calma,
se marchan a la orilla, para poder descansar.
Ya llega la primavera, y la temporada es buena.
¡quiero vivirla contigo!
y no quiero que te duermas.


            Tengo mi mente atravesada por espejos rotos,
porque el dolor comprime,
quiero sentirlo de continuo, que me mate,
que no pase a mi recuerdo.
Tengo los ojos secos y con sangre,
y un cuchillo clavado en el ombligo,
porque mi pena es roja,
yo no quiero un verso que con mi carne rime
pues los versos son reflejos de un pasado cierto
¡Que en el corazón se imprime!

            Mientras mi martirio exista,
me mortifique, torture, y mi soma encoja,
mi mano será ese aire que tu piel respire,
el colchón donde reposas,
mi voz la nana que te arrulle,
mi sonrisa la piedra en que te apoyes,
mis labios el remedio de tu calentura,
seré de tus lágrimas la esponja,
mi voz el cuento que quieres que recite
y mi amor será la seguridad que buscas.

            Que mil perros me muerdan las entrañas
y daré rienda suelta a las dotes del arte que presumo,
quiero llevarte hasta ese muro
desde donde se ve el mundo y las vecinas,
puedo entretener tus ratos con mis juegos
y llevarte de la mano hasta la luna,
y, aunque obvio, decirte que te quiero Fina

            Que navegue mil leguas submarinas
y no pueda salir a flote desde el fondo,
que me piquen alacranes en los pechos
si no puedo amamantar tu sed de niña;
que he perdido tiempo, mucho tiempo,
viendo pasar las horas una a una
sentado, pidiendo en una esquina.
Olvidé abonar el huerto
y cogí las mandarinas
cuando no estaban maduras.

            Aún recuerdo la casa de los padres,
aquella que acaso esté en un cajón de tu alacena,
pero es que me vienen fotos a la mente,
tus lazos, mis zapatos, el agua del cántaro,
los peines, nuestro gato,
las cunas, los hermanos,
el dulce de tomate, nuestras mañas
y el día que volvió papá desde Alemania.

Que vengan los cristales a mis ojos,
que lluevan los filos lentamente,
para que no se cumpla en mi jamás esta condena,
que se retuerzan las tripas de mi sabia
y me mantenga despierto el sufrimiento de mi enojo.


            Miguel Hernández me ayuda
umbrío por la pena, casi bruno.
Lorca me grita desde las raíces del olivo.
Carilda Coliver me trae su Miedo,
que está mi padre rodando entre las cosas.
Mi madre se olvida del invierno
y mis heridas brotan gota a gota.

                       

Dedicado a mi querida hermana Fina.

jueves, 31 de marzo de 2011

A TU LADO

Me sabe a sal tu pelo
y es verde tu mirar,
me miras y me muero
por ser tu respirar,
tu chispa es lo que quiero
para ir contigo al mar.

Me sabe a miel tu boca
y para mi es poco un beso;
si me hablas o me tocas
me nublo, me embeleso,
tu fortaleza de roca
me retiene preso.

No quiero escapar de ti
no quiero vivir sin verte,
porque sería un triste fin
haber vivido y perderte.

Déjame aquí como un perro,
dame comida en tu mano,
ponme ataduras de hierro
y olvida que soy humano.

Quiereme como una sombra,
óyeme como a un latido,
pero deja que me esconda
en tu pecho,
y que me duerma contigo.

jueves, 17 de febrero de 2011

ELEGIA PRIMERA (MIGUEL HERNANDEZ) RECITA MATÍAS ANTÓN MENA

Homenaje del pueblo de Torrevieja a Miguel Hernández celebrado en el Teatro Municipal el 29 de diciembre de 2010
Recita en el nº 38 Matías Antón Mena, el poema "Elegía primera al poeta Federico García Lorca"


sábado, 5 de febrero de 2011

MELANCOLÍA

  

        Surcos tengo tantos hechos,
que apenas ánima los cubre;
de arados de miel
fueron hijos un día,
del secano y el barbecho.
Hoy yacen en las sombras,
de los huecos oscuros
de las cumbres.
Hoy, he roto el espejo.

EL VIENTO DE LAS RENDIJAS


          Si miro los colores de mi cima,
los veo grises y opacos.
¿Qué fue de las ilusiones,
que tuve hace pocos años?
          Si vuelvo la cabeza, brilla
a lo lejos, un sol que no me quema;
unos rostros, y me apena
el verlos tristes.
          Si observo, el campo camina,
porque los olivos andan,
y las flores, y los cardos;
¡Hasta el labrador se marcha!
          Si abro los ojos
es para despedir a alguien.
¿Por qué he de acostumbrarme?
No me gusta ver llorar al aire.
          Si estoy ante el espejo,
comprendo cómo es que todo termina,
apunta mi rostro arrugas de viejo,
y en mi pelo, nieve deposita el tiempo.
          Cuando busco dentro de mí,
sólo veo lágrimas, y luces amarillas,
y largos railes de tren, sí,
veo una roca durmiendo.
           La luna blanca del asfalto,
no encuentra brechas
donde servir de cuna,
a una amapola que perdió el color;
a aquel débil rayo de la luna.
           Y lleva tantas carreteras hechas,
que está cansada de promesas,
ahora quiere un sol caliente
y un cielo hermoso.
           Si intento soñar, no puedo,
porque hay pesadillas de hierro
que destruyen mi reposo.
            Un frío me arrulla,
y me envuelve el cuello.
Un calor de piedras
en mis ojos.

martes, 11 de enero de 2011

SENTADO EN LA ESPERA

Cuán apresurado, el tiempo,
pasa a veces,
e irrumpe en mi vida,
¡Cómo se detiene, siempre!.

Y espero que crezcan
las blancas margaritas;
que nazcan cantando al día;
las cojo, las acerco a mí,
y me hablan.

Entonces se detiene.
Cuando enmudece el sol,
se mueve el cielo, lentamente,
cambia el color:
¡Corre de repente!.

No quiero, no.
¡Que se detenga!
Una piedra juega dentro de mi ser,
pequeña...
Por ella canto,
con ella siento.
¡Que corra o se detenga!
pero, que venga.

RESEÑA

            Nació en Torrevieja el 8 de agosto de 1957. Se diplomó en Profesorado de E.G.B., en la universidad de Murcia y  ha dedicado gran parte de su vida al mundo del arte, la pintura, la poesía y sobre todo el teatro, en el que ha hecho de todo, interpretando infinidad de personajes. Dirigió la reposición de "Don Juan Tenorio" a los cuarenta años de su estreno en Torrevieja; "La venganza de Don Mendo", en la que fue, a la vez, protagonista; y de 1.996 al 2.000 "La Pasión" de Luis Fernandez Ardavín (en verso). Obras de las que previamente había adaptado los guiones.

            Es de destacar su interpretación de Bernarda en "La casa de Bernarda Alba" de García Lorca, estrenada en el Festival Internacional de Teatro de San Javier (Murcia) el 3 de Agosto de 1.998; y como pintor la realización de los diseños o0riginales del vestuario de "Don Juan Tenorio" y "La Pasión", realizados en los talleres ilicitanos de La Alegría de las Fiestas.

           A la edad de catorce años comienza a escribir poesía, cualidad que hereda de su bisabuelo José Pamies (El Loro), versador popular y gran rival del famoso Catín oriholano. En esta ocasión publica su segunda recopilación en un libro titulado "Huellas en el Sol" presentado por el catedrático y doctor en pedagogía, torrevejense, Ramón Minguez Vallejos, con el que fundó en su día el grupo de teatro Arlequín, que tantos años luchó por el teatro en nuestra localidad y fuera de ella, en plazas, calles y teatros, con una gran cantidad de obras y de distintos géneros.

          Su primer libro fue "Jirones de Corazón" presentado por la escritora y periodista, también torrevejense, Encarna Hernandez Torregrosa, y del que han salido hermosas habaneras y otras polifonías, estrenadas algunas de ellas  como obligadas en el Certamen Internacional de Habaneras y Polifonía de Torrevieja : "Un marinero" (polifonía 49 certamen, obligada), "A tu lado" (habanera 50 certamen, obligada), "Grumos de sal" (estrenada por la coral Francisco Vallejos con dirección de Manuel Martinez Guirao), "Poder Volver" (estrenada en el mismo escenario por la coral Manuel Barberá), "Gaviota errante" (inédita), entre otras. Grandes músicos han compuesto con él como Francisco Casanovas Tallardá (España), Beatriz Corona (Cuba) y Javier Busto (España).
                                                                                                                       LUCIA VERA SÁEZ

jueves, 6 de enero de 2011

UNA LUZ MENOR

           Yo se que en la distancia
hubo un señuelo,
de los que el cazador
lleva a su boca;
plagado de calor que no es de fuego
y lleno de frescura y de inocencia.

           Yo se que no hay momento
de sosiego...
para el que en derredor
te está mirando;
porque esparció cenizas por el suelo
y al aire peregrino
le regaló mi llanto.

          Yo se que cuando llega
la tarde hasta mi puerta,
se cubren mis ventanas
de gotas de cristal,
mi corazón se inquieta,
y lloran las paredes
pinturas de colores,
desde que tú no estás.

          Yo se que alguien te acoge
bajo  una manta verde
de prados y de mar,
y toma entre sus manos
las tuyas que son alas,
y prontas a volar.

         Yo se que estás pensando
en mí, desde que duermes,
en los tejados rojos
de auroras de papel,
y que sueñas, a veces,
sólo a veces,
que al sol vas a volver.

         Yo se que se consume
mi vida en la esperanza
de verte aparecer.
Y lucho, y sufro, y lloro,
porque no puedo nunca
dejarte de querer.

EN EL BAUL



           Cuando miro el alma dormida sola,
entre tanto madero y papel seco,
quisiera ser de mis sonetos eco,
que dibuje colores de amapola.

          Viajar sobre la grupa de una ola,
lleno de espuma blanca mi chaleco,
y la mente diciéndome: "no peco",
oyendo el mar en una caracola.

          Ser siempre un niño alegre y risueño.
Mundos de verdes sauces que no lloran.
Quisiera ser un sol más halagüeño.
  
          Al par que vuelvo la mirada, sueño:
siento en mis ojos lágrimas que afloran,
y una intensa lucha tengo con mi dueño.